México se encuentra en un momento crucial para aprovechar el potencial de la Inteligencia Artificial (IA) y convertirse en un jugador clave en esta industria emergente. Con una gran cantidad de empresas especializadas en el desarrollo de productos basados en IA y un creciente número de startups innovadoras, México ha logrado importantes avances en la aplicación de esta tecnología en diversos sectores, desde la industria hasta la atención médica.

Según un estudio de IDC, el 90% de las empresas mexicanas ya aplica IA en sus negocios, utilizándola para optimizar procesos, prevenir fraudes y mejorar la toma de decisiones. Este impulso se ha dado a pesar de la falta de apoyo gubernamental a la ciencia y la tecnología durante el gobierno actual. Sin embargo, con la llegada de una científica universitaria a la presidencia y la creación de la Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación, surge la esperanza de que el apoyo a la IA se fortalezca en los próximos años.

Uno de los principales retos que deberá enfrentar la nueva administración es el diseño de políticas adecuadas para asegurar el uso correcto de los datos y la información en el desarrollo de la IA. Además, será necesario invertir en la formación de una fuerza laboral altamente calificada en áreas como desarrollo de software, ciencia de datos e ingeniería de IA.

La investigación y el desarrollo también jugarán un papel clave en el avance de la IA en México. Una inversión continua y significativa en estas áreas permitirá al país desarrollar capacidades propias en esta tecnología y aprovechar al máximo sus beneficios.

Más allá de los desafíos, la aplicación de la IA en la administración pública también representa una oportunidad para aumentar la eficiencia del sector y mejorar la toma de decisiones de los administradores. Como señala el doctor Fernando Filgueiras, Director de Investigación de la Escuela Nacional de Administración Pública de Brasil, "la aplicación de la IA en la administración pública implica expandir las capacidades del sector público para resolver diferentes problemas y aumentar su eficiencia".

México se encuentra en una posición privilegiada para aprovechar las oportunidades que ofrece la Inteligencia Artificial. Con una base sólida de empresas y startups innovadoras, y la esperanza de un mayor apoyo gubernamental, el país tiene el potencial de convertirse en un líder regional en la aplicación de esta tecnología. Sin embargo, para acelerar el proceso, será crucial abordar los retos de formación de talento, inversión en I+D y diseño de políticas adecuadas. Si se toman las medidas correctas, la IA puede ser un motor clave para impulsar la innovación y el desarrollo económico de México en los próximos años.