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La icónica marca de relojes de lujo Rolex ha sido sancionada con una multa de aproximadamente 100 millones de dólares por la agencia antimonopolio de Francia, la Autorite de la Concurrence, debido a una práctica ilegal que se extendió a través de diez años. La ofensiva de Rolex tenía como objetivo restringir la venta en línea de sus exclusivos relojes suizos por parte de distribuidores autorizados.

La justificación presentada por la unidad francesa de Rolex, que alegaba la necesidad de combatir la falsificación y el comercio paralelo, fue rechazada por las autoridades. La Autorite de la Concurrence consideró que estas acciones constituían violaciones graves al cerrar un canal de comercialización, perjudicando tanto a consumidores como a minoristas. 

La multa impuesta a Rolex incluye una orden para que la unidad francesa informe a sus minoristas sobre la decisión y publique un resumen de la misma en su sitio web en un plazo de dos meses, durante siete días consecutivos. La medida adoptada por la Autorite de la Concurrence se basa en quejas de la industria y redadas realizadas por la autoridad.

El órgano regulador dejó claro que considera a Rolex Francia solidariamente responsable junto con Rolex Holding, Rolex y la Fundación Hans Wilsdorf. Este acontecimiento plantea interrogantes sobre las prácticas comerciales de la prestigiosa firma suiza y destaca la importancia de garantizar la libre competencia y proteger los derechos de consumidores y minoristas en la era digital.

En 2017, la empresa se consolidó como la de mejor reputación del mundo, según la lista de Forbes. Lego Group ocupó el segundo sitio en el ranking, seguido por Walt Disney, Canon y Google

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