La tan celebrada inversión de Elon Musk en Nuevo León parece tambalearse. Un rumor, surgido de la biografía del empresario, publicada en mayo y escrita por Walter Isaacson, así lo hace entender.

En un mundo lleno de reveses y cambios inesperados de dirección, no debería de ser sorpresa que un multimillonario cambie de planes, recalcule y ejecute en función de los nuevos escenarios que se presentan. Por eso es que la supuesta decisión de mudar la megafábrica de Tesla, de Santa Catarina, Nuevo Léon a Texas no deja boquiabiertos a quienes la comentan, pese al evidente descontento que provoca.

Al principio, el ahora dueño de X, antes twitter, había adelantado sus planes para edificar una megafábrica durante el gobierno de Samuel García, incluso se había previsto la construcción de una línea de metro que conectara dicho espacio con la línea 4 y la línea 6 del metro regiomontano. Sin embargo, la reciente biografía revela una sorpresa que pocos esperaban.

En palabras del periodista, Musk tomó la decisión de cambiar la ubicación de la planta de fabricación de autos eléctricos de Tesla. Una de las principales razones que motivaron el revire fue la dificultad que tendrían los ingenieros de su empresa para trasladarse continuamente al parque industrial Santa Catarina.

Hasta el momento, ni el gobernador de Nuevo León, Samuel García, ni Tesla, ni el propio Elon han reportado actualizaciones definitivas al respecto.

Fue a principios de marzo cuando el hombre más rico del mundo, CEO de TESLA, visitó el estado de Nuevo León para anunciar que se construiría una nueva gigafactory, una fábrica de dimensiones monstruosas. El lugar elegido fue el parque industrial Santa Catarina, espacio destinado al ensamblaje, que apunta a la fabricación de 20 millones de unidades (en 2030) sumadas a las de las otras cuatro plantas existentes. ​