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En una solicitud dirigida al Senado de la República, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha pedido autorización para permitir la entrada de 11 militares armados de Estados Unidos al país. El objetivo de su presencia en territorio mexicano sería proporcionar entrenamiento a elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) durante el periodo comprendido entre enero y marzo de 2024.

Según un oficio emitido por la Secretaría de Gobernación y remitido a la Comisión de Defensa Nacional del Senado, los militares estadounidenses participarían en la actividad denominada "Fortalecer las Capacidades de las Fuerzas Especiales de la Secretaría de la Defensa Nacional". Esta iniciativa busca fomentar la cooperación entre las fuerzas armadas de México y Estados Unidos mediante el intercambio de conocimientos y habilidades en materia de defensa.

El gobierno mexicano ha destacado que la presencia de la delegación estadounidense tiene como propósito abordar amenazas comunes en el hemisferio norte del continente americano y fortalecer la relación bilateral militar entre ambas naciones. En caso de recibir la autorización por parte del Senado, la delegación estaría compuesta por 11 instructores del 7to. Grupo de Fuerzas Especiales del Comando de Operaciones Especiales Norte del Ejército de Estados Unidos.

Esta solicitud ha generado diversos comentarios y opiniones en el ámbito político y social, suscitando debates sobre la colaboración militar entre México y Estados Unidos y las implicaciones que podría tener en la seguridad nacional, tanto por factores externos, como la influencia internacional, como los internos, relacionados con la profundización de la militarización en el país. Se espera que el Senado analice cuidadosamente la petición antes de tomar una decisión al respecto.