Los tacos, una verdadera joya culinaria mexicana, han encontrado su hogar en "El Califa de León", ubicado en la avenida Ribera de San Cosme número 56 desde 1968. Este icónico establecimiento de la alcaldía Cuauhtémoc ha sido reconocido a nivel mundial al obtener una estrella en la prestigiosa Guía Michelin, convirtiéndose así en la primera taquería en alcanzar este honor.

Mario Hernández Alonso, uno de los propietarios del negocio familiar, compartió la emocionante historia detrás de este legendario lugar que ha dejado una marca imborrable en el mundo culinario. Fundado por Juan Hernández González y Josefina Alonso Ruiz, "El Califa de León" ha sido venerado por generaciones de comensales gracias a su compromiso con la calidad y el servicio excepcional. Mario Hernández, aún sorprendido por el galardón, lo atribuye a la dedicación, la calidad de los productos y la fidelidad de sus clientes a lo largo de los años.

Ahora, con el reconocimiento internacional, Mario se compromete a elevar aún más los estándares de excelencia de la taquería. "Ser la primera taquería en la Ciudad de México premiada con una Estrella Michelin es una responsabilidad que nos impulsa a ser mejores cada día", afirmó.

La taquería, abierta los 365 días del año, excepto los jueves y viernes santos, bajo la dirección del chef Arturo Rivera, garantiza una experiencia gastronómica inigualable de 11 de la mañana a 2 de la madrugada.

Al hablar sobre el proceso de selección de la Estrella Michelin, Mario reveló el meticuloso proceso de evaluación llevado a cabo por los expertos de la guía. "Dicen que mandan a gente conocedora a degustar en muchos sitios y ellos se llevan grabado en su paladar el sabor de lo que prueban", explicó.

El arduo trabajo y el dominio culinario del chef Arturo Rivera han sido la clave para que "El Califa de León" haya creado la receta secreta que lo llevó a obtener este codiciado reconocimiento internacional.