Según un sondeo de Reuters, se estima que la inflación en México experimentó una desaceleración en el mes de febrero, lo que refuerza las expectativas de una posible reducción en la tasa de

interés clave por parte del Banco de México (Banxico) durante el mismo mes. Los analistas consultados predicen que la tasa de inflación anual se habría estabilizado en un 4.42%, mostrando una

disminución con respecto al 4.88% registrado en enero y continuando la tendencia descendente que se observó al cierre del año pasado.

El índice de inflación subyacente, considerado un mejor indicador al excluir precios volátiles como los de la energía y los alimentos, se proyecta que caiga al 4.62% durante el mes de febrero.

Esta cifra representaría su nivel más bajo desde junio de 2021. A pesar de esta disminución, ambas tasas permanecerían por encima del rango objetivo establecido por Banxico del 3%, con un

margen de más o menos un punto porcentual.

La posible desaceleración inflacionaria sugiere un panorama económico que podría alentar al banco central a considerar medidas para estimular la actividad económica, como una reducción en

las tasas de interés. Sin embargo, la persistencia de la inflación por encima del objetivo establecido podría plantear desafíos para las autoridades en su búsqueda de mantener un equilibrio entre

el crecimiento económico y el control de los precios al consumidor.

Estas proyecciones inflacionarias serán seguidas de cerca por los mercados financieros y los analistas económicos en busca de señales sobre la dirección futura de la política monetaria en

México. La decisión de Banxico respecto a las tasas de interés será crucial en el contexto de una economía que busca recuperarse de los impactos de la pandemia, mientras se enfrenta a

desafíos persistentes en el frente inflacionario.