El escenario económico para México se vislumbra desafiante en 2025 si Donald Trump resulta reelecto como presidente de Estados Unidos y lleva a cabo su plan de imponer una tarifa comercial del 10% sobre todas las importaciones estadounidenses, según un análisis de Moody's Analytics. Este esquema podría llevar a la economía mexicana a una recesión y desencadenar una serie de efectos negativos en comercio, inflación y estabilidad financiera.

Reducción del comercio y alza en la inflación

El informe de Moody's destaca que la imposición de tarifas afectaría gravemente la producción en México, que depende en gran medida de su comercio con Estados Unidos. La contracción en las exportaciones mexicanas, especialmente en sectores clave como el automotriz y manufacturero, empujaría al país hacia una recesión.

A esto se sumaría un alza en la inflación, impulsada por los mayores costos de las exportaciones mexicanas hacia EE.UU. y por la depreciación del peso, que encarecería las importaciones, exacerbando el desequilibrio comercial.

Posibles respuestas y riesgos adicionales para México

México podría optar por responder con medidas similares, imponiendo un arancel del 10% a las importaciones provenientes de Estados Unidos. Sin embargo, este escenario de represalias mutuas podría agravar aún más el comercio bilateral y generar inestabilidad financiera.

Una estrategia alternativa sería permitir que el peso se deprecie de manera controlada para mitigar los efectos de las tarifas, lo que mejoraría la competitividad de las exportaciones mexicanas. No obstante, este enfoque podría generar acusaciones de manipulación cambiaria, lo que afectaría la confianza de los inversionistas y podría intensificar la guerra comercial entre ambos países.

Moody's concluye que cualquiera de estas alternativas traería un impacto significativo en el crecimiento económico y la estabilidad tanto de México como de Estados Unidos, aumentando la incertidumbre para los mercados financieros internacionales.