La triste noticia del fallecimiento de Elena Larrea, reconocida activista y fundadora del santuario para caballos Cuacolandia, ha conmovido a la comunidad defensora de los derechos de los animales. Larrea, quien dedicó su vida al rescate y protección de caballos y burros mexicanos maltratados, falleció el

martes 19 de marzo debido a complicaciones de salud, específicamente a causa de una trombosis pulmonar que provocó un coágulo en su pulmón, según informó Cuacolandia en un comunicado oficial.

La noticia del fallecimiento de Larrea generó un profundo pesar entre sus compañeros activistas y seguidores, quienes reconocieron su incansable labor en la protección de los animales. El Movimiento Animalista de Puebla expresó sus condolencias a través de las redes sociales, destacando el legado de

Larrea como una figura aguerrida en la defensa de los derechos de los animales y como una protectora incansable de los seres más vulnerables.

Elena Larrea fue una voz destacada en la lucha contra el maltrato animal, especialmente enfocada en la protección de los caballos, burros y otras especies. Su activismo no se limitó solo al rescate de animales, sino que también fue una impulsora de medidas legislativas para combatir la zoofilia y promover

leyes que garantizaran el bienestar de los animales. Su incansable labor dio frutos en febrero de este año, cuando el Congreso de Puebla tipificó el delito de violencia sexual contra los animales, un logro significativo en la protección de los derechos animales en México.

El legado de Elena Larrea perdurará en el corazón de aquellos que compartieron su causa y en la vida de los animales que ella rescató y protegió. Su partida deja un vacío en la lucha por un mundo más compasivo y justo para todas las especies.